Evaluación detallada con instrucciones personalizadas para que acudas al tratamiento de la doctora con la piel previamente preparada.
Te entregamos un protocolo de cuidado previo con productos y técnicas recomendadas para equilibrar y fortalecer tu piel, asegurando que llegue en óptimas condiciones al día de la cita.
Con pautas personalizadas sobre exfoliación suave e hidratación intensiva, maximizamos la receptividad de tu piel a los activos profesionales que la doctora aplicará durante el tratamiento.
Incluimos indicaciones claras para evitar irritaciones o sensibilidades, garantizando una sesión más cómoda y un proceso de recuperación más rápido una vez que comience la intervención especializada.
Contacta con nosotros para que nuestro equipo pueda resolverte todas las dudas sobre este tratamiento.
Cada recomendación parte de un diagnóstico personalizado donde analizamos tu tipo de piel (seca, mixta, grasa…), nivel de sensibilidad y cualquier condición particular (acné, manchas, arrugas).
Comparamos tus necesidades con las fichas técnicas de cada cosmético (ingredientes activos, concentración, pH) y seleccionamos solo aquellos cuya formulación ha demostrado eficacia en tu perfil cutáneo. Además, trabajamos con marcas profesionales con estudios clínicos que avalan sus resultados.
Mañana: Limpiador suave → tónico (si aplica) → sérum antioxidante → hidratante → fotoprotector.
Noche: Limpiador (o doble limpieza) → tónico → sérum de tratamiento (retinoides, péptidos o ácidos) → crema nutritiva.
La pauta estándar es usar exfoliantes o ácidos 1–2 veces por semana, y ajustar la frecuencia según la tolerancia de tu piel. Todas las instrucciones detalladas vienen con tus productos para que no te quede ninguna duda.
7–14 días: Mejoría en la hidratación y sensación de confort.
4–6 semanas: Reducción de imperfecciones superficiales, unificación del tono y disminución de la sensibilidad.
3–4 meses: Resultados más profundos como atenuación de arrugas finas y firmeza mejorada.
Realizamos un seguimiento mensual para ajustar productos y protocolos, asegurando que avances de forma constante hacia tus objetivos.
Plan de seguimiento óptimo, donde revisamos la evolución de tu piel y ajustamos productos o protocolos para asegurar beneficios visibles y duraderos.
Realizamos un diagnóstico detallado de tu piel para definir tipo, sensibilidad y objetivos estéticos, de modo que cada producto y tratamiento encaje con tus necesidades específicas.
Limpiador suave que respeta el pH natural, seguido de serums o ampollas con activos concentrados (antioxidantes, ácidos o péptidos) que corrigen y previenen imperfecciones desde la primera aplicación.
Programamos revisiones periódicas para evaluar la respuesta de tu piel, ajustar las dosis de los activos y renovar tu protocolo, garantizando una evolución constante y resultados duraderos.